En la iglesia parroquial de Nuestra Señora del Castillo se rinde culto a Santa Isabel, su patrona.
Éste es uno de esos pueblos que en otros tiempos estuvo agrupado a Medina del Campo. Al separarse adquirió el nombre de Nueva Villa. Lo de las torres, es presumible que aquí existieran dos o tres conventos con este tipo de construcción.
Su edificio más destacado, está en el centro del casco urbano, la Iglesia de Nuestra Señora del Castillo, de ladrillo, y reconocible por su torre. El interior, guarda dos magníficos retablos y dos Cristos de gran valor. Puede ser visitada contactando con el Ayuntamiento.
La Ermita del Cristo, de ladrillo, está situada junto al cementerio, y se la reconoce por su cúpula de color rojo. Presenta una estructura al exterior que recuerda a las iglesias ortodoxas del este de Europa.
Es un pueblo de tradición ecuestre, y como tal, existe un lugar en el Camino del Caño de la Vega, que permite alquiler caballos. Para aquellos que disfruten del campo, existe también un merendero en el Camino del Vallejo, llamado "Castaño".
Las fiestas que aquí se celebran tienen como anfitriones a Santa Isabel y al Santo Cristo. Ambas desarrollan un programa de festejos lleno de verbenas, campeonatos deportivos o juegos tradicionales como la calva. Las primeras son el 2 de julio, y las segundas el 14 de septiembre. Hay que apuntar además, que tras las fiestas de Santa Isabel, se desarrolla un concurso de doma vaquera, de gran atractivo.